top of page
Buscar

Buscando lo perdido

Al pasar del tiempo, la forma en cómo se desarrollan las cosas a nuestro alrededor es vertiginosa, para algunas cosas resulta una ventaja, sin embargo, para otras no.


Hace unos días tuve la necesidad de utilizar mis guantes porque hacía mucho frío, pero al intentar buscarlos me di cuenta que uno de ellos estaba perdido, hice todo lo que estuvo a mi alcance para encontrarlo, aunque al final no tuve éxito.


Cuando alguno de nosotros se da cuenta que ha perdido algo trata de hacer lo necesario para recuperarlo, si es posible escarbaríamos hasta lo más profundo si ese fuera el caso.

Dios te hace pasar por procesos de crecimiento porque necesita recordarte que tenemos que seguir haciendo frutos y buscar eso como algo que apreciamos mucho, con muchas ganas.


ree

Mateo 7:18-20 Reina-Valera 1960

18 No puede el buen árbol dar malos frutos, ni el árbol malo dar frutos buenos. 19 Todo árbol que no da buen fruto, es cortado y echado en el fuego. 20 Así que, por sus frutos los conoceréis.


La comodidad que las actuales condiciones de vida prestan al cristiano han sido progresivas y abundantes en comparación con toda la historia antigua cristiana y muy a pesar de ello no hemos sabido capitalizar esa ventaja que nuestros padres espirituales nos sirvieron a la mesa para dar los siguientes pasos en la compleja historia y enriquecedora de la Iglesia de Cristo.

¿Nos hemos distraído en el proceso de crecimiento espiritual? Sí, pero no solo eso, también afanado y hasta estresado olvidando lo más importante de tener una relación con Dios: el disfrutar de su gracia y misericordia día tras día.


Son tiempos de cambio, no tengo la menor duda de ello y son cambios necesarios, ¿Recuerdas? La semilla tiene que morir para que una nueva crezca.


¿Qué clase de cristianos queremos ser? Y ahora añado a esa pregunta ¿Qué clase de iglesia somos? Sé que es sumamente difícil afrontar el dolor de nuestros errores u omisiones, pero te digo algo, aún estamos a tiempo de hacer algo distinto.


Dios quiere hacer cosas maravillosas contigo y de eso no hay ninguna duda. Dios no te quiere quieto, Él te ha convertido en antorcha para el mundo.


A veces me imagino que Dios ya viene por nosotros, por lo que siempre se ha dicho, que el regreso de Jesús está cerca y me preocupo por la clase iglesia que Él encontraría si llegara hoy.


La biblia dice en Hebreos 10:24-25

Preocupémonos los unos por los otros, a fin de estimularnos al amor y a las buenas obras. No dejemos de congregarnos, como acostumbran hacerlo algunos, sino animémonos unos a otros, y con mayor razón ahora que vemos que aquel día se acerca.


Congregarse: ἐπισυναγωγή episunagogué (reunirse) / ἐπισυνάγω episunágo / “guiar a alguien mientras caminas con él haciéndolo de manera hospitalaria, específicamente en este caso a la vida cristiana”.


¿Te puedes imaginar que tan lejos o cerca estamos de ser así como iglesia? Sé que la respuesta no es fácil, pero no deseo que solo seamos capaces de notar eso en nosotros, sino que también podamos hacer algo al respecto como si de verdad Dios y su palabra nos importara, así como nos empeñamos por encontrar algo valioso que hemos perdido.

Pero, ¿A qué se parece la vida cristiana?


Hechos 2:46-47

No dejaban de reunirse en el templo ni un solo día. De casa en casa partían el pan y compartían la comida con alegría y generosidad, alabando a Dios y disfrutando de la estimación general del pueblo. Y cada día el Señor añadía al grupo los que iban siendo salvos.


Hace mucha falta que está iglesia regrese a su lugar y que se reencuentre con su propósito. Amados hermanos, está iglesia está viva porque tú y yo seguimos con vida, volvamos a intentarlo, para que, si Dios viene pronto encuentre que nuestro fruto es bueno y es permanente.


Dios bendiga tu vida.

 
 
 

Comentarios


CCB-LOGO-blanco.png

Comunidad Cristiana Betesda

bottom of page